La abalancha de novedades
y movimientos
acefalos de un responsable
que me acompañe y explique
que lo que siento va a pasar
y que no me desanime.
Vivir dentro de este reloj
que me pasea por el abismo
de la euforia efímera
a la tristeza que no me teme ni un poquito
y me hace frente, cada vez que distraigo, o desacelero.
quisiera decir
que hoy fue un buen día,
pero mentiría: Fue malo y dificil y triste.
Pero creo que por eso justamente
fue necesario.
Habitar el dolor,
hashtags de los que más esquivo y me escurro
algún día voy a tener que hacerle frente
a ese gigante en mi placard.
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